PUERTO LÓPEZ 2025: ENTRE EMBELECO, CHARLATANES Y TIK-TOK
Por: Apolinar Beltrán Villazón
La gobernadora Rafaela en su alocución en las «fiestas de ExpoMaloca», vociferó que el Meta es un “territorio de oportunidades», incluyendo a Puerto López, siendo un ejemplo con sus emporios económicos y agroindustriales que yacen en la altillanura. En tanto, el alcalde Pedro repite en sus tik-tok’s que su amado Puerto López es «estratégico»; su mandato de «puertas abiertas”; que el futuro de este pueblo es el turismo, vendiendo la idea de un centro geográfico prospero; invirtiendo miles de millones en festivales. Cada uno de los mandatarios haciendo lo mejor de su elocuencia en todos lados, sobre todo en redes sociales, con sus locutores, presentadores, «influencers» o «YouTubers» contratados -pre y pospagos- del departamento del Meta, para mantener “muy buena» imagen de la inversión, desarrollo y progreso en algunos pueblos. Sin embargo, en el caso de Puerto López, el populismo, estadísticas ficticias y la demagogia no puede con su cruda realidad.
Cualquier persona puede constatar esta realidad, se observan despilfarros, robos y saqueo, donde los actuales mandatarios poco, o nada, dicen sobre estas problemáticas sociales, económicas, laborales, ambientales y demás. De igual forma, no se avizora una planeación estructural y planificada a estos complejos problemas que de solucionarse podrían sacar estos pueblos, y sobre todo a Puerto López, del subdesarrollo y el atraso social al cual lo han sometido durante décadas.
Problemáticas, contratos y proyectos inconclusos, como: La Planta para Agua Potable en el río Negro; La planta de Potabilización y tanques en Pachaquiaro y otras veredas; Los filtros para potabilizar el agua en Instituciones Educativas; La «morgue» «desmantelada» y al parecer siniestrada, en un «cementerio» que, para legalizar plata, ahora en su puerta se llama «parque cementerio» y sigue en la «espera» de una supuesta reubicación; Las vías del pueblo: unas acabadas, otras «destapadas» y sin pavimentar; La plaza de mercado aniquilada y abandonada; El mirador Matapalo sin operario y con serios despilfarros; El vulgar negocio de la concesión del alumbrado público y sus contratos leoninos; La Planta de Tratamiento para Aguas Residuales sin funcionamiento (igual sucede en centros poblados); Los servicios públicos costosos y con falencias; Las instituciones educativas con necesidades prioritarias: desde aseadoras, profesores y demás, la educación sigue siendo depauperada y de regular calidad; La biblioteca pública construida desde el 2003 en perímetro de un humedal, sigue siendo la «puta del humedal» donde todos los alcaldes de turno «legalizan» contratos; lo mismo que el llamado Centro Comercial; sigue la promesa de elevar el hospital a otro nivel; como también la promesa de campaña del alcalde de «abrir el matadero municipal»; del costoso contrato del Catastro de Redes -nada se sabe-; los hallazgos de la Contraloría en cientos de contratos y obras durante los últimos años, no han culminado en nada, solo el silencio de la Procuraduría y la Fiscalía, en temas como: la plaza de mercado, los filtros o purificadores, la P.T.A.P. de río Negro, el terreno del sendero ecológico, parque la Ceiba, el robo en el contrato de la Estación de Policía, contrato de tres días «capacitación empleados de la alcaldía 2019», entre otras denuncias que quedaron «tapadas» o en el olvido.
Sigue la contaminación de ríos, caños y lagunas, se sigue contaminado el caño Banderas e irrespetando su margen ambiental establecida, lo mismo que ciertos sectores de la reserva hídrica La Venturosa, La Conquista y otros sitios ambientales.
A pesar de la instalación y los costosos mantenimientos de cientos de cámaras de seguridad, el pueblo sigue enfrentando serios problemas de inseguridad. La pobreza persiste, no existe un censo o caracterización formal de los inmigrantes venezolanos, y el crecimiento del mercado informal o «rebusque», ahora denominado «emprendimiento», continúa en aumento. El microtráfico prolifera en varios sectores, el consumo de alucinógenos o “drogas” entre los jóvenes es elevado, sin que se observe una campaña seria y objetiva para abordar esta problemática. Mientras tanto, se espera el resultado del cuantioso contrato del «catastro multipropósito», que traerá consigo una nueva estratificación en ciertos predios y un aumento en el impuesto predial, lo que conllevará el desmonte de subsidios a miles de familias en un proceso de «nueva sisbenización». Asimismo, está por venir otro contrato de gran envergadura para los «ajustes» al mal llamado Plan Básico de Ordenamiento Territorial. Por otro lado, en cuanto a los cuantiosos contratos y proyectos de índole nacional, como el «dragado y navegación del río Meta» y el «cuento del ferrocarril», sigue sin haber información clara sobre su avance o ejecución.
Señora Gobernadora Rafaela, alcalde Pedro y concejales: ya es hora de comenzar a construir un municipio bien planeado y estructurado. Es fundamental iniciar con un catastro funcional, un sistema de redes eficiente y un Plan Maestro de Acueducto y Alcantarillado bien planificado. La gente de este pueblo merece recibir al menos agua tratada, una educación de calidad y un hospital digno y humano.
Es momento de dejar atrás el populismo y el clientelismo en un pueblo donde abundan las necesidades y se carece de los mínimos derechos humanos y sociales. Asimismo, es hora de que este pueblo despierte de su letargo y reclame lo que, por ley y derecho, le pertenece. De lo contrario, seguiremos atrapados en los TikToks, el embeleco politiquero de siempre y a la espera de los próximos «salvadores» o verdugos, que no tardarán en aparecer con sus campañas electorales.
