ALEVOSIA VS: BLANDURA SIN LIMITES
Por: Lic. Gildardo Quevedo Florido

Coordinador para el Meta de Ascolpen. Asociación de pensionados de Colombia.
Al «REVOLUCIONARIO”, como se autodefine el jefe del actual gobierno, hay que recordarle, si para algo llegase a servir, que de nada le vale su alevosía frente a la división de poderes, a las instituciones, frente a los gremios e incluso frente a su camada de otrora, anarquistas que no revolucionarios; de nada le vale para impresionar la galería, si a la vez sigue siendo tan blando y esquivo para enfrentar con seriedad los problemas del país. Tres problemas que prometió enfrentar en su gobierno: la violencia, la corrupción y renegociar el TLC con Estados Unidos, teniendo en cuenta que, como Economista, entiende perfectamente que no somos competitivos frente a los subsidios que reciben de sus gobiernos los productores gringos y Europeos, entre otros países.
Dos productos para la muestra, el arroz y la leche. Blandura total con el oligopolio que maneja la comercialización del arroz, incluido el de contrabando …Y frente a los productores de leche, les pide que se asocien para parecerse a los productores Europeos y a través de sus corporaciones, desarrollen la producción y comercialización de la leche. O sea, totalmente doblegado frente a los TLC que están acabando nuestra producción, gracias a sus políticas de subsidios. Aquí no hay subsidios, solo impuestos, vacunas y créditos caros.
De las reformas hundidas ni hablar. He pedido a ilustres colegas del mundo sindical en el cual milite 25 años, que me regalen un listado de las ejecutorias del revolucionario Petro en su gobierno. Se niegan a hacer el debate y encuentran la vía del facilismo, de acusar de Uribista a quienes no somos Petristas, para no enfrentar como líderes o simplemente como ciudadanos, la responsabilidad histórica de la peor ruina de la economía, de acabar con las pensiones de la próxima generación y meter aún más en el hoyo del atraso económico y tecnológico a nuestro país.
No es un gobierno revolucionario, como se definió emparejado con Benedety, en aquel memorable consejo de ministros: no basta con haber sido contestatarios frente a los resultados en el escrutinio de las elecciones de «mi general Rojas pinilla”, lo que motivo la creación del M19 para hacer una revolución, es decir, un cambio profundo del país, se requiere conocimiento, seriedad y coherencia y, por supuesto, honestidad.
No basta la Alevosía con los compatriotas acompañada de la blandura frente a los países que nos han usurpado la soberanía.
